El viaje como extensión de la rutina cotidiana
«Fragmentos del Libro Tequila Inteligente, relato de su experiencia como Ciudad y Destino Inteligente.»
Por Joxean Fernández. Director de Programas de CEFIR – Centro de Formación para la Integración Regional.
La llegada de las vacaciones o de unos días festivos genera una riada de turistas que se desparraman en todas las direcciones. El viaje se convierte en un fin en sí mismo. Este proceso incluye los preparativos, la organización
de la estancia, la adquisición de pruebas testificales que aseguren que el viajero ha estado donde dice haber estado.
El viaje es narrado en directo, con conexiones regulares que muestran una colección escasamente perdurable de imágenes triviales. Millones de personas cruzan el globo para continuar con sus actividades habituales. El turismo se convierte en válvula de escape de vidas en permanente estado de insatisfacción.
Perdido en la jungla de las radiobalizas
¿De qué nos sirve disponer de toneladas de datos si no somos capaces de desarrollar el algoritmo necesario para interpretarlos? Tapizar el destino turístico de sensores puede contribuir a generar una experiencia mimética
al de otros destinos. En lugar de generar interacciones de mejor calidad, la tecnología no revela los elementos diferenciales del destino, sino que los oculta bajo un filtro uniforme. La experiencia turística revelada a partir
de dispositivos inteligentes puede ser una experiencia aletargadora, que tiende un velo uniforme sobre la realidad. La membrana tecnológica impide que podamos disfrutar de las verdaderas sensaciones que puede producir el destino.
La curiosidad recíproca requiere de mecanismos para salvar las distancias. Y en determinados destinos, la tecnología marca distancias insalvables, ellos y nosotros, los que viajan pertrechados de todo tipo de gadgets y los que reciben pasivos su mirada ciega, su deambular orientado por señales geolocalizadas que no conducen a ningún lugar. El
destino sensorizado es uno preparado para recibir el desembarco de esos turistas ciegos que vienen a mirar sin ver, que visitan sin entender, que no se empapan de realidad porque la traen filtrada desde sus dispositivos pretendidamente inteligentes.
La definición de Destino Turístico Inteligente y sus ejes
En los últimos años se ha abordado la problemática de los Destinos Turísticos Inteligentes desde distintas perspectivas, incluyendo el análisis de redes, cadenas de valor, procesos de innovación, uso de las TIC en
la gestión de destinos, e-destinations, destinos 2.0, etc. La perspectiva epistemológica utilizada establece prioridades y determina el tipo de gestión propuesta.
La gestión de los destinos turísticos en la actualidad se ha visto afectada de forma significativa por un conjunto de tecnologías con capacidad para cambiar de forma radical los procesos turísticos, incluyendo la interacción de los turistas con el territorio, el diseño y comercialización de los productos turísticos, la toma de decisiones en torno al propio viaje, antes, durante y después del mismo, etc. Ninguno de los actores que participa en el ecosistema turístico escapa a estos efectos: desde las administraciones responsables de las políticas públicas de turismo, pasando por los operadores turísticos, los residentes y los propios turistas.
El marco conceptual de los Destinos Turísticos Inteligentes, derivado del concepto de Smart City, se ha desarrollado con el objeto de disponer de herramientas que permitan mejorar la capacidad de comprensión del destino ante el impacto producido por las nuevas tecnologías aplicables a los distintos subsistemas turísticos.
El territorio turístico aparece en este contexto como un espacio fluctuante, configurado como una red de actores con intereses y expectativas diferentes, en ocasiones opuestas y difícilmente conciliables, intensivo en información,
donde se desarrollan distintas dinámicas de conocimiento, tecnología e innovación, algunas de ellas con un gran potencial disruptivo.
El espectro tecnológico que puede incidir en la configuración y desarrollo del destino turístico es muy amplio, pero destaca, como en otros ámbitos de la economía y de la sociedad, la capacidad de las TIC para modificar de
forma significativa la cadena de valor del sector.
El enfoque de Destino Turístico Inteligente no es neutral. El territorio se presenta como elemento estructural clave para impulsar la competitividad económica y la mejora del posicionamiento global del destino. La adaptación exitosa al nuevo entorno digital es la prueba de fuego que verifica el paso a la modernidad. Tal es su fuerza icónica, que no sorprende que la mayoría de los actores se sientan seducidos por su llamada y emprendan la búsqueda del Santo Grial que los salvará de todos los males. En un segundo plano, postergadas, ocultas o invisibles, quedan las dimensiones culturales, sociales, antropológicas e históricas del territorio.
1 Modo de producción caracterizado por hacer que la misma se realice en serie o en cadena. Su nombre deriva de uno de susprogeni tores ideológicos, Henry Ford.
El libro Tequila Inteligente es el storytelling de un proyecto y de una realidad. Una experiencia concreta: la de Tequila, en su camino a convertirse en un Pueblo Mágico Inteligente en 2020 y en una Ciudad Inteligente en 2040. La lógica inicial, las decisiones tomadas y sus aprendizajes, asimismo, la visión de expertos internacionales, a veces crítica, a veces futurista, a veces entusiasta, se han dado encuentro en este libro. Expertos que han participado de una forma u otra en el proceso, se enmarcan en la experiencia internacional e interpretan el fenómeno de las Ciudades Inteligentes, validando acciones y decisiones y brindando señales, señalando riesgos y brindando opciones. De igual forma, se ha entrevistado a un variado número de tomadores de decisiones en relación con Tequila, para dar su visión de un tema que ha venido para quedarse de una manera u otra en nuestro Pueblo Mágico.