La gestión de las ciudades y las bandadas de pájaros
Por Federico de Arteaga. Ex Director Grupo JB-Cuervo. Experto en Ciudades, Destinos Inteligentes, en Responsabilidad Social y Sostenibilidad.
Las ciudades han cambiado, la complejidad no es nueva pero se ha instalado en las ciudades más allá de lo que se ha podido analizar desde la sociedad, la gobernanza, la economía y la gestión.
La ciudad es un sistema complejo, lo que implica que se tratan de procesos no lineales, emergentes y autoorganizados en la naturaleza y en la sociedad.
Como expresa Innerarity[1]” los problemas complejos son aquellos cuya problematicidad comienza por la formulación; no permiten una clara definición o descripción; no se diferencian netamente de otros problemas con los que están vinculados, son pluridimensionales y no se pueden abordar por partes. Un sistema es complejo cuando no se puede describir completamente el número de sus elementos, su pluralidad, entrelazamientos e interdependencias”.
Ya no se trata del modelo lineal predecible de causas y efectos. Tampoco es el de la cuarta revolución industrial como tanto se dice. Ni revolución ni industrial, es un concepto que se repite por falta de imaginación y de realidad. Si hay algo que ha cambiado es esa concepción, ahora se trata de algo más vivo que mecánico, más cerca del ámbito biológico que del físico, de lo digital y del crecimiento que del ensamblaje.
En un sistema complejo según Mitchell[2] “es un sistema en el que grandes redes de componentes sin control central y con reglas sencillas de funcionamiento dan lugar a un comportamiento colectivo complejo, a un procesamiento sofisticado de la información y a una adaptación mediante el aprendizaje o la evolución”.
El reto es saber como se gestiona la complejidad. Hay algunos principios o leyes como la Ley de Ashby de la variedad requerida. “Una forma de medir la complejidad de un sistema es su variedad, entendiendo por ello el número de estados posibles o modos de comportamiento que puedan adoptar un sistema. Controlar una situación implica ser capaz de hacer frente a sus complejidad es decir a sus variedad, en este sentido la ley de Ashby formulada que “solo la variedad puede absorber (destruir) la variedad” o que el control solo es posible si la variedad del controlador es equivalente a la variedad de la situación objeto del control (Ashby 1956). Es decir; , que dice que “la complejidad de la organización tiene que ser mayor que la variedad de los problemas que se deben acometer”.
Y allí esta el desafío porque el todo no solo es mayor que la suma de las partes, sino que es diferente. En definitiva se trata de la gestión de la información y del conocimiento, pero más que nada del desconocimiento, de lo que Wilke[3] llamaba “la ignorancia sistémica”.
Ciudades con big data, trazabilidad, control de accesos, conectividad, conectografía, redes, precisan una lectura holística, compleja y con una gobernanza moderna; ése es el reto de la gestión.
Ya no se puede gestionar centralmente, solo con responsabilidades compartidas por componente, es necesaria una diversificación de los centros de decisión de contar con “action tanks” mucho menos jerárquicos y mucho más de equipos de proyectos.
Una bandada de pájaros no prescinde del ambiente, como no se prescinde en qué ciudades se está para prevenir el comportamiento colectivo en los sistemas biológicos. Pero hay reglas que los “action tank” deben tener en cuenta en su gestión; i) la separación; ii) el alineamiento y iii) la cohesión. Atrás de todo hay una coperación no una participación.
Esto no es exclusivo de las ciudades y las bandadas; las comunidades de música electrónica en internet se comportan parecido, ya que en definitiva son clusters de nodos independientes en una organización descentralizada en la que ningún nodo determina el comportamiento grupal.
La gestión de las ciudades pasan por una gobernanza compleja, por las tendencias, por redes digitales, físicas, sociales, en espacios geográficos, de conocimiento y de ignorancia, de gente, de geografía, de valores y de autenticidad.
El diseño de esa gestión será de cada ciudad y de cada bandada de pájaros.
[1] Innerarity.D. Una teoría de la democracia compleja. 2020.
[2] Mitchell.M.Complexity.Complexity. 2009
[3] Dystopia. Wilke.H. 2002.
