Belo Horizonte. Entrevista a Marcos Boffa.
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Por Marcos Boffa
¿Cómo está enfocando Belo Horizonte su lógica de Smart City?
La actual gestión municipal está pautada en dos premisas: «Gobernar para quien necesita» y «Hacer funcionar con calidad». Para alcanzar tales metas, se creó una cartera con 46 proyectos estratégicos, siendo la eficiencia un factor en común en todos ellos. Diversos de ellos están conectados de forma transversal por medio del Programa Belo Horizonte Ciudad Inteligente. El programa pretende aproximar el poder público, las empresas, las universidades y los ciudadanos para transformar Belo Horizonte que ya es referencia en sustentabilidad también en tecnología. Permitiendo que el desarrollo tecnológico se utilice con respecto a la sostenibilidad ambiental, además de contribuir a que todos los ciudadanos sean alcanzados por los servicios esenciales como saneamiento básico, energía, educación, salud, movilidad y alimentación, contribuyendo también a perfeccionar las formas de relación de los ciudadanos con el poder público.
¿Cómo el turismo se verá beneficiado con esta iniciativa?
El turismo en Belo Horizonte cada vez más busca posicionarse como un sector transversal de las políticas públicas urbanas con intercesiones diversos sectores como el medio ambiente, el desarrollo económico y social.
Para esto la participación y el compromiso de los residentes con la construcción de proyectos de ciudades inteligentes será fundamental para la transformación de Belo Horizonte en un destino turístico inteligente y sustentable. Fueron estas reflexiones que nos motivaron a promover este reciente seminario donde tuvimos la oportunidad de invitarlo para hablar sobre el proyeto de Tequila.
Después del Seminario Cidades & Destinos Turísticos Inteligentes qué le ha llamado la atención de Medellín y Tequila y cree que alguna de estas experiencia puede ser de utilidad para Belo Horizonte.
Estoy cada vez mas convencido en la actualidad de ampliarnos en experimentos entre ciudades latinoamericanas. Nuestras realidades pos-coloniales permiten reflexiones mas enriquecedoras comparados con las clássicas norte-sul. De maneras distintas las experimentaciones de Medellín y Tequila reafirman la necesidad de involucrarnos los ciudadanos y diversos sectores de la sociedad (universidades, actores culturales e empresas) en los proyectos de transformación de la ciudad. Las soluciones tecnológicas top-down no serán capaces de innovar a las políticas públicas sin tener en cuenta estos múltiples stakeholders y la complexidad de nuestras sociedades desiguales en estos tiempos de crisis de la democracia.
