Preguntas frecuentes que se hacen los CEO´S sobre temas de carbono
Por Federico de Arteaga. Ex Director Grupo JB-Cuervo. Experto en Ciudades, Destinos Inteligentes, en Responsabilidad Social y Sostenibilidad.
¿Por qué comprar bonos de carbono?
La compra de bonos de carbono son una opción que permite rápidamente ser neutro en carbono apoyando proyectos locales al mismo tiempo. Se enmarca en la estrategia de soporte de la “rapidez”. Es el primer paso en un plan de mitigación que permite: i) asumir un compromiso institucional con un logro verificado que puede ser comunicado; ii) lograr un reconocimiento de liderazgo; iii) acceder a créditos con mejores tasas de interés en bancos con estrategia de sostenibilidad; y iv) comunicar internamente en la empresa que la definición se concreta.
La compra de bonos de carbono, debe ser parte de un plan de mitigación bonos-plan de mitigación interna. Hay empresas que se han comprometido en su comunicación a comprar en el primer año 100% de bonos e ir mitigando internamente a un 20% por año en la compra de bonos, por lo que en 5 años ya no se compran más bonos si no se llega por reducción efectiva.
¿Todos los sectores lo pueden hacer?
Hay sectores con más opciones de mitigación y con opciones más económicas que otros. Las compañías aéreas tienen menos opciones que un hotel y un hotel menos que el agro. Lo importante es el compromiso mixto de mitigación y revisar presupuestalmente la estrategia, rapidez o escala o las dos simultáneamente.
¿Qué bonos conviene comprar, locales o internacionales?
En general, las empresas tratan de comprar bonos locales para ser coherentes con el lugar donde contaminan. Esto no siempre se puede por la demanda que existe de proyectos a nivel mundial y la poca oferta de proyectos en determinados países, ya sea porque no hay o porque ya se le compraron los bonos.
¿Qué proyectos de bonos conviene comprar?
Existen diferentes maneras de analizar la compra de bonos y en qué proyectos invertir. Porque al final es una inversión que se le hace a un proyecto que ha dejado de contaminar para ser neutro en carbono.
Por ejemplo, entre un proyecto de granja de cerdos que produce biogás y un proyecto forestal, ¿cómo decidir?
- El proyecto de cerdos no es de cerdos, es de biogás, la utilización en energía limpia a partir de un desecho orgánico que genera metano. Por un lado se deja de emitir Gases de Efecto Invernadero (GEI), por otro se mejora la operatividad de la granja y se genera biogás para uso interno para mitigar el gasto en electricidad. Asimismo, se está apoyando socialmente a proyecto de pequeños productores en muchos casos que de otra manera no podrían acceder a inversiones.
- El proyecto forestal es el más solicitado, el más caro en el precio de los bonos y el más escaso. Además, los que más tiempos llevan de concretarse. Como es un tema de escala muchas veces se apoya a grandes empresas. Los proyectos forestales debe además analizarse en cuidado, por tema de cobertura vegetal, especies, y son mucho más restrictivos en las legislaciones nacionales.
Otra consideración es el tema de precios de los bonos y esa es una decisión estratégica. Se quieren comprar bonos forestales, entonces se está dispuesto a pagar un 40% más que bonos de otros proyectos. Se los quiere locales, a veces hay y a veces no en el país donde la empresa contamina.
¿Cuáles son sus precios?
Los precios se fijan en un mercado voluntario y como todo mercado es oferta y demanda y es sumamente volátil, tanto en precio como en la categoría de bonos. Un bono forestal puede valer el doble o triple que un bono de biogás y si en el país en que se busca hay pocos el precio sube, como todo mercado. Hay bonos desde 5 – 50 euros tt/Co2 eq (toneladas de carbono equivalente).