El fútbol femenino gana espacio en Uruguay: el caso Club Nacional de Football.
Entrevista a Iván Alonso, exfutbolista uruguayo y Valeria Colman, capitana del Club Nacional de Football de Uruguay.
¿Qué espacio debería ocupar el fútbol femenino en lo deportivo y en la sociedad? y ¿Por qué?
En lo deportivo el fútbol femenino debería poder darle un espacio a una niña que recién inicia en el deporte y donde pueda crecer practicándolo. Esto es algo que se viene logrando de a poco, pero no existe en todo el país y en todas las ligas, un niño que quiera jugar y practicar en toda su niñez el fútbol tiene múltiples opciones para elegir, hoy una niña tiene que buscar e incluso conformarse con las opciones que hay. Y esto hace que en la niñez donde es la edad donde puede adquirir y pulir la técnica, y gestos motores específicos del deporte se pierde.
Ya cuando pasas a la adolescencia tenés mas lugares, pero creo que se debería conformar más categorías, hoy solo existe sub16 y sub19, es muy difícil para una gurisa de 17 años poder competir con una de 19 años la cual prácticamente es una mujer.
En cuanto a lo social, cada vez más se habla de fútbol femenino pero aún son en momentos “destacados”, como alguna buena participación de selección, los clásicos, ahora el tema de los contratos. Creo que la mayor exposición haría que más gente se acerque y que más chicas y niñas puedan animarse a jugar.
¿Cuáles son las principales barreras para su despegue, las obvias y las no tan obvias?
No se sigue o se notifica en los medios de comunicación el campeonato femenino como se hace con el masculino, incluso con las selecciones tanto mayor como juveniles. Creo que la mayor difusión ayudaría a hacer más visible la liga y de esa manera se acerque público y como consecuencia hacer un escenario atractivo por ejemplo para marcas o inversores.
Otro aspecto a mejorar es la desigualdad que existe entre los clubes, donde unos solamente le dan el nombre y un par de camisetas a sus jugadoras y otros que apuestan más al desarrollo, esto hace que la liga sea muy dispareja y que durante muchos años el campeonato esté entre dos o tres equipos.
Que los club dejen de ver el femenino como un gasto sino como una inversión donde en un futuro puedan realizar acciones que hagan que la rama femenina sea autosustentable, la mayor cantidad de veces se quedan en la respuesta fácil; “no rinde” y no se ponen a pensar en que puedan hacer para que rinda.
¿Qué plan tiene el CLUB NACIONAL DE FOOTBALL para la promoción del fútbol femenino?
Es un plan de desarrollo, el cual inició incorporando al femenino al área deportiva lo que hizo que las prácticas y las condiciones mínimas sean las mismas que las divisiones formativas masculinas del club. Luego de esto, se pasó a ir sumando diferentes aspectos exclusivos para el desarrollo del femenino, como los contratos. Más exposición en las redes, lo que hace que se visibilice más y en un futuro las marcas puedan tener interés lo que podría lograr que en un futuro la rama sea autosustentable.
¿Qué consejo le podría dar a las chicas que se inician en el fútbol respecto a la importancia de los valores, la disciplina, el estudio, la relación con sus parejas, su familia?
Jugar al fútbol te brinda muchas experiencias sociales, poder vincularse con niñas de tu misma edad que se apasionan por un deporte, esto hace que aprendan a trabajar en equipo, a ponerse en el lugar de la otra, a intercambiar opiniones y aprender a ver una situación de diferentes perspectivas, lo que hace que puedas crecer desarrollando todos estos valores y habilidades sociales que te sirven para el día a día no solo para la cancha. La disciplina es muy importante si sueñan con ser jugadores profesionales, ser constante y disciplinadas hace que puedan crecer mucho más como jugadoras.
El estudio para mi debe tener la misma o en algunas edades mayor importancia que el fútbol, poder avanzar en la escolaridad hace que cuando seas grande y no puedas llegar a ser una jugadora profesional puedas tener otro camino para vivir, o si logran ser jugadora el estudio te da herramientas en las cuales podes tomar mejores decisiones tanto dentro de la cancha como fuera. Hay que aprender y hacer el esfuerzo de complementar las dos actividades, porque se puede hacer las dos cosas.
En cuanto a las relaciones con los demás, como la familia o pareja es importante poder tener el apoyo de las personas que convivimos el día a día y que van a ser parte de nuestras vidas siempre, ahora no es tan común que la familia no esté de acuerdo con la práctica del deporte pero si pasa hay que darle tiempo y hacerlos entender que jugar al fútbol es algo que amamos nos apasiona y nos hace feliz. Yo creo que con el tiempo lo van aceptando e incluso después terminan compartiendo.
La experiencia de Valeria Colman, en el fútbol femenino, el plan de desarrollo del club y la realidad del día de hoy.
Mis inicios en el deporte fueron en el barrio que vivía jugando en la calle, canchita o en la escuela. Recién a los 13 años pude tener mi primer contacto con un equipo de fútbol femenino, el que competía en encuentros amistosos los fines de semana. En ese equipo estuve hasta los 16 años, luego dejé de jugar porque el liceo más cercano que tenía solo daba clases del curso que iba en la tarde y el único grupo que había en la mañana no me cambiaron aunque había presentado una carta que jugaba al fútbol, algo a lo que siendo varón podía acceder, el cambio de turno por deporte. Un año y poco después el técnico me llama para invitarme un fin de semana a unos partidos amistosos donde iban a estar los entrenadores de las categorías sub17 y sub20 femeninas de Uruguay, luego de jugar esos partidos me dijeron que fuera a entrenar con la selección. Con 17 años fue mi primer contacto con otras jugadoras que ya tenían su experiencia en fútbol federado, AUF algo que en ese momento me enteré que existía. Recién a esa edad podría decir que pude participar de entrenamientos adecuados, donde pude adquirir conocimiento de lo táctico, y estratégico del fútbol. Luego de participar en ese sudamericano, me invitaron a jugar en un equipo AUF y en 2008 participe con 18 años mi primer campeonato de la liga más importante de Uruguay.
Al año siguiente Nacional hace llamado de aspirantes para volver a presentar categoría, es así que desde 2009 hasta hoy soy jugadora del club. En tantos años viví muchas realidades como jugadora dentro del club, pase momentos donde iba a entrenar y al llegar no nos dejaban utilizar la cancha y tener que hacer la práctica en un cantero o parque público, no teníamos ropa para entrenar y cada una iba con lo que tenía, donde muchas veces sentimos que el club solamente participaba en femenino porque debía tenerlo. A otros más lindos donde participamos en las copas libertadores, salimos campeonas, también el club fue uno de los primeros en pagar un viático a sus jugadoras. Y a fines del 2019 después de estar 10 años en el club, pude ver y disfrutar los primeros pasos que el club dio hacia el desarrollo del fútbol femenino institucional. Estos cambios fueron fundamentales para el desarrollo como jugadoras, creo que el deporte femenino necesita de esto, de acciones que perduren en el tiempo y que aporten al desarrollo de la deportista.
Pasamos de ir a una cancha donde los vestuarios no estaban en condiciones, a tener un espacio en La Ciudad deportiva Los Cespedes, ahí donde todos los jugadores entrenan. Lo primero que se cambió fué lo mental, ir ahí es todos los días sentirse parte del club, llegar y tener un vestuario en condiciones, ropa para entrenar que la dejas antes de irte y al otro día la tenés para volverla a usar, una cancha en excelentes condiciones, frutas después de entrenar, personas a cargo que se manejan de manera profesional. Esos cambios sin dudas te hacen sentirte más profesional, porque yo creo que lo que cobres en el deporte no te hace ser profesional sino en este país lo más importante es el entorno, las condiciones que tenes para practicar el deporte. Algo que un adolescente de 14-15 años siendo jugador de nacional ya lo comienza a vivir, todo esto recién una mujer que juegue al fútbol lo puede vivir a partir de 2020 en el club. Como saben, a todo esto que les estoy contando, el club apostó a realizar los primeros contratos, lo que establece un vínculo formal entre la jugadora y el club, algo que hoy por hoy solo nacional te da.
Esto implica que nosotras como jugadoras podamos contar de un dinero extra a los viáticos, es decir que nos genera ingresos sea poco o mucho eso es discutible y también entendemos que el deporte está en crecimiento y que es mejor dar pasos seguros que vayan avanzando con el tiempo que vivir lo que jugadoras de otros países vivieron en el apuro de hacer algunas ligas profesionales en latinoamérica.
Todo este entorno hace que podamos rendir mejor, poder evolucionar como deportistas, es así que el año pasado pudimos cumplir el objetivo principal el cual es siempre que seas parte de la institución más grande del país que fue salir campeonas.
Este año seguimos avanzando, y lo fundamental es que el club sigue apostando al crecimiento del deporte, en este año todas las jugadoras van a firmar contrato y algo que me parece más importante que las jugadoras del interior tienen un lugar donde vivir en Montevideo para poder entrenar con las exigencias que hoy por hoy tiene ser jugadora de Nacional. Hay muy buenas jugadoras en el interior y todavía para ellas sigue siendo muy difícil poder venir a jugar a Montevideo donde la liga se va desarrollando más lo que implica que si querés crecer y avanzar tienes que compartir en AUF.
Tenemos claro que cuando más tenemos, más tenemos que rendir pero todas estamos felices de eso porque es lo que siempre soñamos.