La ciudad de Santander: Un destino para tener en la mira. Entrevista a José Luis Gil.
Por: José Luis Gil
Usted ha estado en Tequila y hemos realizado un Convenio de Cooperación con la Universidad de Cantabria y el Ayuntamiento de Santander. ¿Cómo ha visto usted a Tequila en su camino hacia la Smart City y qué podría aprender de Santander, ciudad de vanguardia en este tema en Europa?
Parafraseando a Roger Garaudy, en los animados finales de los sesenta del siglo pasado, Tequila hace realidad que «lo pequeño es hermoso» y lo puede seguir siendo, aún más con el buen camino emprendido en su proyecto Smart.
En Santander, este proyecto se «puso de largo» en el pasado curso de agosto que organiza la Universidad Internacional Menéndez Pelayo sobre «Ciudades Sostenibles», con gran éxito. Santander, ciudad también de no gran tamaño en el contexto europeo, ha conseguido ser referencia en el ámbito Smart City y podemos acompañar a Tequila en que consolide su ya significativo papel a nivel de ciudades de turismo de calidad.
A su entender, ¿cuál es el orden lógico de implantación del trinomio TIC-ciudadanía-sostenibilidad?
El trinomio TIC-ciudadanía-sostenibilidad se ha desarrollado de manera desigual a favor de las TIC y sus infraestructuras. Se puede entender este desequilibrio si pensamos que primero es necesaria la infraestructura para poder desarrollar su potencial y sus aplicaciones, como ocurrió en su momento con el tendido de fibra óptica que hoy nos permite una implantación prácticamente total de Internet en las ciudades. Lo ideal es que esté equilibrado, pero ciudadanía y sostenibilidad son factores de implementación a más largo plazo.
¿Hasta dónde juega la tecnología y hasta dónde la información en la concreción de una Smart City?
La Web Smart Barcelona describe las Smart Cities como «aquellas ciudades que aplican las TIC en la misma ciudad con el objetivo de proveerla de una infraestructura que, en cierto grado, garantice un desarrollo sostenible, un incremento de la calidad de vida de sus ciudadanos, una mayor eficiencia de sus recursos (tanto de tipo humano como energético) y una mejor participación ciudadana». Casi todas las definiciones coinciden en los mismos elementos básicos: las TIC, los ciudadanos y la sostenibilidad.
¿Qué rol juegan la ciudadanía, la gobernanza y los ayuntamientos?
Las principales críticas que se pueden hacer hasta el momento sobre las Smart Cities harían referencia a la falta de implicación de la ciudadanía en el desarrollo del modelo, quizá por incapacidad de los técnicos y gestores municipales para hacer comprensible el mensaje. A falta de estudios sociológicos que nos aclaren el porqué de esa falta de implicación con el modelo de Ciudad Inteligente, cabría hacerse una sencilla pregunta:
¿Están realmente las Smart Cities mejorando de manera sensible la calidad de vida de los ciudadanos? La respuesta es, desde nuestro punto de vista, positiva, pero ¿Percibe realmente el ciudadano esa mejora?
Por último, ¿cómo podría Tequila maximizar la cooperación con
Santander y qué podría aportar Tequila a Santander en el marco de
este convenio de colaboración?
La ciudad de Santander es un ejemplo de cooperación con su universidad. La gestión de los residuos sólidos urbanos, el ciclo integral del agua, el programa Smart Water, la coordinación del Plan Estratégico o el propio Smart Santander constituyen todo un
portafolio de actividades apoyadas en esa colaboración. Santander y la Universidad de Cantabria aspiran a replicar sus experiencias en América y muy especialmente en México, por la gran presencia de santanderinos y cántabros en este país que tan excepcional acogida siempre les dio. Tequila pude ser la «antena mexicana» de este proyecto.